A ver, sin intención de defender a los que no quieren hacer huelga, ¿eh?, que en su derecho están (como yo en la de pensar que se equivocan, pero bueno, ese es otro tema). Hay mucha gente que tiene su puesto en la cuerda floja y entiendo que haya quienes sientan que no pueden hacerla (luego resulta que si disfrutan de derechos laborales, es por las huelgas, pero bueno, ese es otro tema, "again").
A ver... Un trabajador que no va a las huelgas que convocan sindicatos que no son los suyos NO ES UN ESQUIROL. Un esquirol es un señor que es contratado expresamente para reemplazar a un huelguista. Lo digo por aquello de hablar con propiedad.
Uno elige no ejercer ese derecho, y ya está. Que luego se conculquen otros derechos que tiene, como el de trabajar, es una posibilidad. Pero claro, a otros cientos de miles o millones les conculcan el derecho a la defensa jurídica, la sanidad, la vivienda, el trabajo... Y no por un día, no; de continuo, mes tras mes y año tras año. Así que... un poco de solidaridad con la gente que lo pasa mal día tras día, por favor. Y un poco de vergüenza. Si no haces huelga, no vayas diciéndolo.
«¡Es que yo...! ¡Yo tengo derecho...! ¡Yo...!»
Hombre, por favor... Piensa un poco en tu imagen.
Tú ejerces el derecho al trabajo en día de huelga general por no sacrificar tu jornal de un día (por el bien común y por el tuyo también, aunque no te des cuenta), porque necesitas hasta el último céntimo, por miedo a quedar mal con los jefes y que te puedan despedir, o porque tienes el coco comido por tu amo y eres un servil lameculos, porque te gusta llevar la contraria, o por lo que sea. Bueno, eso es cosa tuya.
Pero no andes tocando los cojones al que pretende hacer huelga tratando de disuadirle, como me consta que está pasando en fábricas del País Vasco, o insultando, o metiéndolo en la lista negra. El que ejerce su derecho a huelga no lo hace para tener un día de vacaciones o por vago (bueno, los estudiantes sí, la mayoría, para qué nos vamos a engañar) ni para hacer daño al país (lo que hay que oír). No. Lo hace como instrumento de presión en defensa de sus derechos (y de los tuyos, gañán).
Así que ojo con andar por ahí en plan "no es el momento de hacer huelgas" o "tenemos que hacer un esfuerzo por nuestro país, como nos pide el gobierno". A ver si, además de conculcar tu derecho al trabajo, te "conculcan" un brazo o el cráneo, por bocazas.
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